El significado de la carta de Compartir en el tarot Osho Zen se enfoca en la Reina de Fuego, que es tan rica y tan reina que puede permitirse dar. Ni siquiera se le ocurre hacer algún tipo de inventario, o guardar algo para después. Dispensa sus tesoros sin ninguna limitación, aceptando y dándole la bienvenida a lo más diverso para que participara en la abundancia, en la fertilidad y la luz que la rodea.
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Cuando aparece esta carta, está sugiriendo que tú también te encuentras en una situación en la cual tienes la oportunidad de compartir tu amor, tu alegría y ti risa. Cuando se hace esto, descubres que te sientes todavía más lleno. No existe ninguna necesidad de ir hacia algún lugar, o de hacer un esfuerzo en especial.
Te das cuenta de que puedes llegar a disfrutar de la sensualidad sin tener posesividad o ataduras, y que puedes dar a luz a un nuevo proyecto o a un nuevo hijo con la misma sensación de creatividad. Todo aquello que se encuentra a tu alrededor parece como si te estuvieras unificando en este momento. Debes disfrutarlo, enraizándote en ello y dejando que la abundancia en ti y a tu alrededor rebose.
Pasamos mucho tiempo durante nuestra insignificante existencia preocupándonos por nuestra imagen. A algunos de nosotros nos preocupa compartir demasiado, compartir cosas que son demasiado personales o compartir cosas que a otros no les gusten. Sentimos que tenemos el deber para con nosotros mismos de crear y preservar cierta imagen desde la cual otros nos percibirán.
Aunque crear límites y mantener una imagen positiva son rasgos admirables, al censurarte a ti mismo, te niegas la oportunidad de compartir tu cosa más importante, tu perspectiva. Como dije en una publicación reciente, nadie puede ver el mundo como tú.
Cada uno de nosotros tiene una historia única que contar. Nuestra percepción del mundo está moldeada por las personas con las que interactuamos, las situaciones en las que nacimos a partir de las acciones que realizamos a lo largo de nuestra vida. A medida que continuamos absorbiendo más información, nuestras decisiones cambian con el tiempo. Cuanto más conocimiento acumulemos, mejor seremos para razonar, cuestionar y reflexionar sobre los problemas que darán forma al futuro de las generaciones anteriores.
No importa cuál sea su opinión, ya sea de izquierda, derecha o directamente en el medio, nunca tendrá un impacto a menos que comparta sus pensamientos e ideas. Cuando colaboramos e intercambiamos estos pensamientos e ideas, aprendemos más sobre nosotros mismos y aplicamos el conocimiento para tomar mejores decisiones.
Al compartir, le está dando a otra persona información que podría cambiar completamente la forma en que ve las cosas. Al compartir, tienes el poder de ayudar a las personas a entenderse mejor a sí mismas y a los problemas que enfrentamos en nuestro mundo demasiado complicado hoy.
Las enseñanzas de Osho sobre la carta de Compartir
Mientras vas hacia arriba, al cuarto centro que representa al corazón, tu vida entera se va convirtiendo en un compartir del amor. La plenitud del amor se ha creado en el tercer centro. Cuando se alcanza, durante la meditación, estás desbordado de amor y de compasión. Necesitas compartirlo, quieres compartirlo, y esto sucede precisamente en el cuarto centro.
Es por esta razón que, hasta en el mundo ordinario, la gente considera que el amor surge del corazón. Para ellos no es más que algo que han escuchado casualmente, no lo conocen en realidad porque nunca ha llegado a su propio corazón.
No obstante, el meditador llega finalmente al corazón. Cuando llega al centro de su ser, es decir, el tercer centro, surge de él una explosión de amor, comprensión, compasión, gozo, dicha y bendición, con tanta fuerza que golpea al corazón y lo abre. El corazón se encuentra precisamente en medio de tus siete centros, y has llegado justo a la mitad.
A medida que se embarca en el viaje de compartir, rápidamente aprendemos cosas sobre nosotros. Empiezas a prestar más atención a tu diálogo interior, obtienes una mejor comprensión de la forma en que piensas y procesas las ideas. A medida que se comienzan a compartir estas ideas, la transmisión de ellas se vuelve mucho más fluida y mucho más cómoda.
Cuantas más perspectivas esté dispuesto a ver y más zapatos esté dispuesto a probarse, mayor comprensión tendrá del mundo que lo rodea y de los problemas que más le importan.
Sin embargo, si nadie comparte su historia, sus pensamientos, sus opiniones o sus ideas, no tendrá nada en qué pensar más que en sus nociones preconcebidas. Sin información adicional para cambiar tu forma de pensar sobre las cosas, estarás atrapado en cualquier mentalidad que ya tengas.