Saltar al contenido

Tarot Osho Zen : Inocencia

El significado de la carta Inocencia del tarot Osho Zen se centra en la figura del anciano de esta carta, el cual irradia un gozo infantil hacia el mundo. Puedes percibir una sensación de gracia a su alrededor. Es como si estuviese en casa consigo mismo y con todo aquello que la vida le ha deparado.

Tarot Osho Zen Inocencia significado

Parece que el anciano estuviera manteniendo una comunicación juguetona con la mantis religiosa que descansa en sus dedos, como si los dos fueran grandes amigos. Las flores rosadas que caen en forma de cascada a su alrededor consiguen representar un tiempo de soltar con relajación y dulzura, siendo respuesta a su presencia y un reflejo de sus propias cualidades.

Se trata de la inocencia procedente de una experiencia profunda de vida, como es la vida de un niño, pero no es infantil. La inocencia de los niños es hermosa, pero es inexorablemente ignorante, y será reemplazada por la desconfianza y la duda a medida que el niño crezca y aprenda que el mundo puede ser un lugar tan peligroso como desafiante.

No obstante, la inocencia de una existencia que ha sido vivida a plenitud cuenta con una carga de sabiduría, y sobre todo de aceptación de las maravillas de la vida que se encuentran en constante estado de cambio.

Te puede Interesar: Tirada Gratis Tarot Osho Zen | Consulta Online de Tarot

El Maestro Osho nos dice sobre la carta de la Inocencia que: “cuando dejas ir tu mente, y la mente incluye muchas cosas, incluso tu nombre, tu identidad y todo porque estas cosas te las traen otros, cuando te las quitas y te las devuelves a los demás, Tendrás una cualidad completamente diferente en comparación con tu antiguo yo: es la inocencia.

Esta acción es una crucifixión de su personalidad y dignidad en la cruz, luego, después de todo, la inocencia revivirá; Volverás a ser un niño y renacerás.”

Las enseñanzas de Osho sobre la carta de Inocencia

Tarot Osho Zen Inocencia

La inocencia proviene inherentemente de una experiencia profunda de la vida como un niño, pero no infantil. La inocencia de los niños es hermosa pero ignorante. Será reemplazada por la desconfianza y la duda a medida que el niño crezca y aprenda que el mundo podría ser un lugar peligroso y aterrador. Sin embargo, la inocencia de una vida plenamente vivida tiene una cualidad de intelecto y la aceptación de la vida cambia constantemente.

El zen te deja saber que, si dejas el conocimiento, dentro de lo cual se incluye tu nombre, tu identidad, y abandonas todo lo que otros te han dado, entonces tendrás una cualidad completamente distinta a tu ser, que es la inocencia.

Esta cualidad puede llegar a convertirse en la crucifixión de la persona, y sobre todo de la personalidad. No obstante, habrá una resurrección ineludible: la resurrección de la inocencia, volviendo a ser un niño otra vez, renaciendo.